El talisman del cine español

El orfanato ha cumplido las expectativas que había creado. Ha recaudado en el primer fin de semana de su estreno (un puente de tres días, es decir, con una jornada más que cualquier otro del año, lo que supone entre tres y cuatro sesiones más de propina por copia) 5'9 millones de euros y ha alcanzado el millón de espectadores. Perfecto. Es lo que necesitaba nuestro cine. La vi en mayo y apenas puedo recordar su argumento o sus imagenes. Primero, porque no acabé de enterarme lo que me contaba. Luego, porque una "película cóctel", como esta, que vampiriza los clásicos que le gustan a su director, lo tiene mucho más difícil para dejar huella. Lo que sí tengo que admitir es el prodigioso efecto en la taquilla de Belén Rueda: dos películas (Mar adentro, El orfanato), dos taquillazos de marca mayor. No es habitual en una recién llegada. Ni aún prodigándose del modo omnipresente que ha hecho ella en toda la prensa. La alegría sería completa si obtuviera esa candidatura personal al Oscar que lo implicados en voz baja dicen que merece. ¿Será Belén Rueda ese talismán que tanto necesita el cine español?